2014 cerrará con un previsible incremento de operaciones de arrendamiento fruto, principalmente, de dos factores.
Por un lado la finalización de ventajas fiscales al arrendatario para contratos que se celebren a partir del 01 de enero de 2015 que podría asemejarse a lo ocurrido en la compraventa de viviendas cuando finalizó la deducción por pagos a la hipoteca.
Por otro lado la leve mejoría en la economía puede hacer que el mercado se dinamice aunque esto habrá que esperar a enfrentarlo al comportamiento de las operaciones de compra.
En cualquier caso, todo apunta a que las tasas de ocupación por arrendamiento seguirán creciendo. En un próximo artículo abordaremos el efecto de la finalización de muchos contratos de renta antiuga en locales comerciales que tendrá lugar el 31 de diciembre de 2014.